En una ciudad que evoluciona sin pausa, hay propiedades que se convierten en testigos silenciosos del tiempo, guardianes de memorias y escenarios para nuevas historias. Esta casa en Altos de Riomar, con 47 años de solidez, es una de ellas. Sobre un terreno de 693M², sus 400M² construidos despliegan amplitud y carácter sala y comedor en espacios independientes, estudio y tres habitaciones, encuentran en la principal un refugio con baño y vestier privados, mientras las otras dos comparten un baño en pasillo. El patio, generoso y lleno de posibilidades, invita a imaginar atardeceres y encuentros memorables. Los baños de la casa y la cocina cerrada aguardan una renovación que la adapte a los tiempos modernos, y la zona de ropas con cuarto y baño de servicio completan un hogar diseñado para la comodidad. Con una estructura que permite soñar en grande —incluso con la posibilidad de un nuevo nivel, con edificabilidad maxima de 5 pisos, para vivienda multifamiliar— y un tanqu